Unidades de deshidratación del gas con tecnología de lecho fijo (tamices moleculares y alúminas)
Descripción
El agua contenida en el gas natural debe eliminarse por varias razones: evitar la formación de hidratos y la corrosión, y lograr el punto de rocío requerido para la licuefacción. La formación de hidratos conduciría a la obstrucción de los equipos y componentes. Esta fase de agua libre también puede contener partes de gas ácido (H2S o CO2), lo que aumenta los efectos de corrosión en la salida: esta es la razón por la cual el gas natural debe deshidratarse.
Las unidades de deshidratación del gas con tecnología de lecho fijo (tamices moleculares y alúminas) pueden adsorber las impurezas mediante un desecante sólido. Los puntos de rocío obtenidos por la tecnología de tamiz molecular superan fácilmente los valores alcanzados con la tecnología del glicol o de Separación a baja temperatura (LTS): el contenido de agua alcanzado con esta tecnología será tan bajo como 1 ppm vol.
Los medios adsorbentes suelen ser lechos de tamiz molecular 4A o 3A: la selección depende de la composición del gas (concentración de CO2 y H2S) y la vida útil requerida del lecho.
Las aplicaciones típicas de estos sistemas son plantas de tratamiento de gas en la entrada de los desetanizadores y unidades de recuperación de GLP en la entrada de las unidades de licuefacción, o pueden usarse para reinyección en pozos.